2. Las barreras de la escucha activa
Segundo capítulo del curso de escucha activa.
Un proceso es la sucesión de una serie de eventos que acontecen unos tras otros con un determinado fin. Este concepto de proceso también se puede aplicar a la escucha, obteniendo de esta forma el proceso de escucha activa.
El proceso de la escucha activa es una serie de tareas encadenadas lógicamente para obtener la totalidad del mensaje, interpretando el significado correcto del mismo. El proceso de la escucha activa se compone de seis eventos:
En la preparación nos predispondremos mental y físicamente para prestar la atención necesaria durante la entrevista.
A lo largo de la comunicación presentaremos una posición adelantada, avanzando el cuerpo desde la cintura y miraremos fijamente a los ojos de quien nos habla.
Aplicaremos una serie de técnicas para demostrar a nuestro interlocutor que le prestamos toda nuestra atención. Estas técnicas son: el refuerzo positivo, la paráfrasis, la reformulación, la ampliación, la técnica de las preguntas, el silencio, asentir con la cabeza y las expresiones faciales.
Además, durante el proceso de escucha activa observaremos su lenguaje no verbal, es decir, sus gestos corporales, sus expresiones faciales y sus características de la voz.
Detectaremos las ideas principales del mensaje, tras localizar las palabras clave y relacionarlas.
Finalmente, mediante la retroalimentación comunicaremos a nuestro interlocutor el resumen del mensaje que hemos escuchado, demostrándole que hemos interpretado correctamente su mensaje.
Comprendiendo el proceso de la escucha activa y practicando sus técnicas, se logrará incrementar la capacidad de escucha activa.
En los próximos capítulos desarrollaremos en profundidad cada uno de los eventos del proceso de escucha activa.